Héctor Montenegro: Ponencia en la Comisión de Industria del Congreso de los Diputados (1 de 3)

Nuestro compañero Héctor Sánchez Montenegro, director de Tecnología de Microsoft Ibérica, ha hecho hoy mismo una ponencia ante la Comisión de Industria del Congreso de los Diputados. Cómo no hay nadie mejor que él mismo para explicar el porqué, como hace en su blog, durante esta semana vamos a replicar en paralelo los posts que Héctor colgará con el contenido de la ponencia. En tres cómodas y muy interesantes entregas de lectura obligada:

«Nada mejor para retomar el blog que con el contenido de la ponencia que hoy he tenido el honor de hacer ante la Comisión de Industria del Congreso de los Diputados en respuesta a la invitación cursada a Microsoft en el contexto de las “Redes de Alta Velocidad” desde la perspectiva de contenidos y servicios. Pero no olvidaré el consejo de my buen amigo Juanjo Carmena a la hora de retomar el blog: “Hector, no hagas posts tan largos”. Así que publicaré la comparecencia en tres posts para hacerlo más digerible. Y Aquí va el primero de ellos:

congresodiputados

“Quisiera comenzar esta exposición agradeciendo sinceramente la invitación que desde la comisión de Industria de este Congreso de los Diputados han cursado a la compañía que represento, Microsoft Ibérica.

Es para nosotros un gran honor ser convocados en este foro al que acudimos con el propósito de compartir nuestro punto de vista en el ámbito de las redes de alta velocidad, aunque desde una perspectiva un tanto diferente, porque sin ser actores activos explícitamente en el mundo de las redes de telecomunicaciones físicas como tal, si participamos intensamente desde la perspectiva del consumidor de esos servicios a través de contenidos, herramientas y servicios, así como desde la perspectiva de la innovación, del crecimiento, del desarrollo y de la evolución de la productividad de las empresas de nuestro país a través de un uso eficiente de la tecnología.

Hemos decidido estructurar esta exposición en dos partes claramente diferenciables, pero íntimamente relacionadas entre sí.

Un primer apartado dedicado a la importancia de la tecnología, la innovación, los contenidos, los servicios a través de la red sobre el desarrollo de nuestro modelo económico y productivo presente y futuro, y un segundo punto sobre el cambio de paradigma tecnológico y económico al que nos aproximamos a velocidades de vértigo, y que bajo el nombre “Cloud Computing” o computación en la nube, se esconde una importante revolución impulsora de mayores eficiencias y posibilidades, así como un cambio asintótico en parámetros tan relevantes para el acceso y consumo de la tecnología, como son la facilidad de acceso a aplicaciones y servicios, su disponibilidad, flexibilidad, dinamismo y la economía asociada.

La innovación no es solo un concepto abstracto al que todos queremos aproximarnos, ni solo un término imprescindible en cualquier agenda tecnológica. Innovación es algo concreto, mesurable, y obtenible solo si detrás hay una apuesta, un compromiso, un plan y un permanente aprendizaje.

Innovar es un proceso complejo. Innovar no es seguir y desarrollar hasta el final las ideas de 4 genios en el ya famoso “garaje”. No se innova en el vacío. Se innova en contexto, y resulta imprescindible visualizarlo desde diferentes perspectivas y tendencias tanto Económicas, como demográficas y tecnológicas fundamentalmente. Es necesario visualizar tendencias que nos permitan adelantarnos al futuro, o como dijo alguien una vez, la mejor forma de predecir el futuro es inventándolo.

Microsoft Ibérica desde luego cree firmemente en la innovación como medio imprescindible de progreso y riqueza global y local, y no en vano contamos ya con 9 centros de Innovación distribuidos por toda la geografía española en áreas tan importantes para el país como el Turismo, el eGovernment, la movilidad, la Interoperabilidad, productividad o el Cloud Computing del que hablaré más adelante

Pero es igualmente imprescindible que las políticas públicas sean favorables a ese proceso de innovación y con sus actuaciones se sienten y potencien las bases para que dicha innovación

  1. mejore la inclusión ciudadana, transparencia, confianza y colaboración en la Administración como parte de un Gobierno Abierto
  2. estimule la competitividad, la creación de empleo cualificado y el crecimiento sostenible a través de cluster económicos que den fundamento a esas grandes apuestas que como nación decidamos como prioritarias
  3. Incremente los usos y alcance de los servicios de la Administración electrónica, fortaleciendo adicionalmente requisitos esenciales como aquellos relacionados con la Sanidad, Educación o Seguridad Pública
  4. Mejore la colaboración entre las Administraciones Públicas, redundando en un mejor servicio al ciudadano desde la interoperabilidad, seguridad y privacidad de datos y sistemas
  5. Proteja el medio ambiente mediante un crecimiento sostenible

Las inversiones tecnológicas, como las redes de alta velocidad protagonistas en este momento en este foro, resultan imprescindibles para tales cometidos, y muy especialmente en un momento en el que adicionalmente queremos reequilibrar nuestro modelo productivo a favor de propuestas basadas en la innovación y en la tecnología. En efecto la tecnología debe ser el vehículo principal que impulse dicho cambio.

La voluntad de emprender ese camino es una condición necesaria y positiva, y aunque la tarea dista de ser sencilla, no es en absoluto imposible.

Nuestra tradicional y “Unamunesca” carta de presentación en este ámbito (“que inventen ellos”), no es genética, ni está escrita a fuego en las Tablas de ninguna Ley.

Aunque si es evidente que tendremos que cambiar más cosas que otros si pretendemos que el sector tecnológico y la innovación se conviertan en uno de nuestros principales motores productivos, como ya lo es en otros países.

Iniciativas como la existencia de un DNI electrónico como base para el desarrollo de una administración electrónica más moderna, así como una Ley 11/2007 garante de derechos ciudadanos de acceso a los servicios de la administración de forma telemática o el inminente real decreto (actualmente en consulta pública) sobre la apertura de datos públicos (OpenData) a favor de una mayor transparencia, colaboración y participación ciudadana, en un modelo que hemos venido conociendo como Open Government o Gobierno Abierto, son sin duda muy positivas y apuntan en la dirección correcta.

Su existencia no solo nos permite avanzar hacia una administración más eficiente, y seguir creciendo en la eficacia de nuestra democracia, sino que además impulsan la capacitación de nuestro sector tecnológico para competir tanto en aquellas áreas importantes en una sociedad del conocimiento globalizada, como en aquellas otras áreas que fortalecen la productividad de nuestro principal tejido productivo: las pequeñas y medianas empresas….”

Mañana continuará …»

Héctor Sánchez Montenegro, director de Tecnología de Microsoft Ibérica